sábado, 25 de abril de 2009

Mascaras

Es difícil ser uno mismo en un mundo donde lo que prima es aparentar. Cuando uno intenta ser como quiere ser, como siente que esta bien, no es aceptado, no es tolerado, y termina por ser marginado.
Cuesta ver como tu alrededor se desmorona, se cae lentamente. Aquello que por años fuiste construyendo..comienza a desplomarse. Claro, todo fue levantado sobre cimientos de cartón..todo estaba tan débil que ante el menor soplido se caería, y así fue. Todo lo construido fue sobre apariencias, falsas amistades, falsos amores, falsas creencias, falsa compañía.
Duele no ser prioridad de nadie, duele saber que nadie te espera, que nadie te extraña, que a nadie le importas realmente, por eso muchas veces preferimos mentirnos a nosotros mismos creyendo que tenemos a nuestro alrededor personas que nos aman, pero la mayoría de las veces nos confundimos.
Me di cuenta que las personas prefieren apariencias, que uno les haga creer lo que no es, que uno adorne la realidad, aunque la misma este vacía. De hecho creo que también lo preferí durante mucho tiempo, o mas bien nose si lo quería pero inconscientemente lo buscaba. Me mentía a mi misma pensando que tenia un circulo que me quería, al que le importaba. Con el tiempo esos adornos se caen, esos cimientos de cartón se mojan y se deshacen.. y entonces surge la verdad de lo simulado, esa verdad que uno busca ocultar, ese vació, esa sensación de soledad acompañada, que es peor que la soledad buscada. Es ahí cuando los sueños se estrellan, cuando la realidad nos choca y nuestras ilusiones se desangran.
Justamente en ese instante es que la comedia se convierte en tragedia, esa vida llena de colores se transforma en una película blanco y negro.. y sobre todo muda, donde nadie te escucha, donde nadie te siente. Comenzás a ser invisible ante el resto, porque no le decís lo que quieren escuchar, porque no aceptas ser como todos quieren que seas y te empezas a aceptar vos mismo. Dialéctica pura.. contradicciones que están en permanente conflicto y que nunca van a reconciliarse.
Las lágrimas empiezan a recorrer el rostro, las consecuencias de la soledad empiezan a acuchillar.. y ahí estoy esperando a alguien que me quiera, pero que me quiera realmente, con el verdadero significado del termino. Harta de escuchar palabras en vano, palabras que no dejan de ser texto con sonido..solo eso. Palabras que mueren cuando son dichas, que están ausentes de sentimientos, que no valen nada aunque a primera vista simulen ser perfectas y que van a desvanecerse cuando uno las necesite.
Hoy decido pagar las consecuencias de ser así, prefiero la soledad a una compañía solitaria, falsa, hipócrita. Elijo elegirme a mi misma por sobre el resto, algo que nunca había hecho, el hacer lo que quiero, sentir lo que siento..y no lo que el otro quiere que haga o sienta para sentirse complacido. Quiero complacerme a mi misma, cansada de buscar la complacencia del otro, adoración que nunca llega, porque cada cual esta ocupado admirándose a si mismo..
Es mejor ser inexistente para el resto, pero verdadero para uno, y no existir para el resto pero sin saber quien es uno mismo.

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